El Gobierno de Cantabria ejecuta el 92 por ciento de las acciones previstas en 2020 del Plan estratégico de protección civil pese a la pandemia

Este instrumento, aprobado a finales de 2019, recoge 95 ejes de actuación con 273 medidas específicas a ejecutar hasta 2024 para la mejora del sistema autonómico de protección civil, a través de siete grupos de actuación: anticipación y sistemas de información y comunicación, prevención, planificación, coordinación, intervención, recuperación, y evaluación y control del sistema.

La titular del área, Paula Fernández Viaña, ha destacado la “alta tasa de efectividad” en la ejecución de las acciones previstas por la Dirección General de Interior y que ha hecho posible que la comunidad autónoma cuente con nuevas herramientas y servicios para una mejor gestión de las emergencias y catástrofes naturales. 

Al mismo tiempo, a su juicio, se demuestra la capacidad de respuesta y adaptación del Gobierno de Cantabria y de su personal que durante el pasado año realizaron una “ardua” actividad centrada en la lucha contra la pandemia y sus consecuencias, al mismo tiempo que mantuvieron la ordinaria prevista inicialmente para “cumplir con los compromisos” del Plan estratégico de protección civil.  

Entre las acciones realizadas en 2020, Fernández Viaña ha resaltado la elaboración del Inventario de riesgos de Cantabria y del Catálogo de actividades susceptibles de generar riesgo, la ejecución de los procedimientos preparatorios de la nueva red digital de comunicaciones, así como la integración telemática del Centro de Atención de Emergencias 112 con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado –Policía Nacional y Guardia Civil-, con el Centro de emergencias de incendios forestales del Ministerio y con la Emisora Central de Dirección General de  Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria.

La aprobación de la Ley de servicios de prevención y extinción de incendios, impulsada por la Consejería de Presidencia, ha sido otra de las acciones más relevantes y que ha supuesto dar respuesta a las demandas históricas del colectivo profesional de los bomberos, garantizar la autonomía de los ayuntamientos en la organización de estos servicios y dar cabida a “importantes mejoras” en el servicio (reconocimiento como agentes de la autoridad, actuación conjunta y coordinada de los distintos cuerpos de bomberos existentes y regulación de la segunda actividad).

Más medios de intervención y coordinación

Entre las acciones de intervención, destaca la movilización de un helicóptero específico en la comunidad autónoma para la extinción de los incendios forestales y la atención de otras catástrofes, el Maya Dama, y que ha tenido un especial protagonismo en el último episodio de incendios forestales en nuestros montes, en apoyo a los servicios de tierra, con la descarga de cerca de 105.000 litros de agua.

En el ámbito de la coordinación, se han elaborado o actualizado ocho protocolos operativos de intervención en emergencias, además del Catálogo de medios y recursos de protección civil, y se han ejecutado los planes de formación y entrenamientos necesarios previstos para la formación continua del personal de intervención.

También se han evaluado las acciones preventivas y de planificación con la organización de simulacros ante emergencias químicas en distintos municipios de Cantabria y la aprobación de una nueva orden de vigilancia y rescate en las playas para incrementar los medios de intervención y la información que reciben los bañistas.

Según ha explicado la consejera de Presidencia, las medidas que no se han podido implantar durante 2020 se harán efectivas a lo lardo del año, junto al resto de las previstas para este periodo de tiempo en el plan, entre las que destacan la elaboración de un mapa de riesgos de Cantabria, la puesta en marcha de la red digital de emergencias para todos los medios de intervención y la integración telemática del 112 y de la central de Cruz Roja.

Por otro lado, ha destacado otros proyectos importantes como es el caso de la elaboración de los planes especiales de protección civil por contaminación marina, fenómenos meteorológicos adversos y riesgos radiológicos y biológicos; la modernización del parque de vehículos del servicio de emergencias y nuevos acuerdos de colaboración con otras entidades para seguir mejorando la capacidad de respuesta del sistema autonómico de protección civil.