21/01/23
En el fútbol hay una máxima siempre y es el que el respeto hacia el rival que debe de ser innegociable. Sin embargo, cuando el respeto se convierte en miedo, al final todo va a la deriva. Y es que eso mismo le ha pasado al Racing en esta ocasión ante el Alavés. Desde el comienzo del encuentro ya se olía que no era el día para los cántabros. Los hombres de José Alberto iniciaron el choque intentando crear el juego ofensivo desde campo propio de forma muy arriesgada y eso a los del "glorioso" les venían de perlas ya que una presión alta a los centrales conseguían hacer mucho daño.
Crónica: David "Bossu"